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Mostrando entradas de 2015
Amor/deflagracion Sé que no es el mejor momento en este verano que quema escalda arde pero no más que yo mira esperaré a la primera hora de la madrugada para hacerte partícipe de esta quemazón y es por tu culpa ya nada podrá apagarlo si no eres tú qué se puede esperar si hasta la rosa pierde su olor cuando apareces cómo quieres que me sienta yo simple mortal perecedero en tu presencia esta combustión que me deflagra me hace delirar y eres tú la responsable y la redentora es que no te das cuenta responsable y redentora benefactora de mis sueños y mis pesadillas hasta el próximo verano y yo sin poder beber de tu elixir quedo sediento de ti calcinado abrasado chamuscado ya no hay vuelta atrás hasta el próximo verano
REGENERACIÓN Mi corazón a la deriva quiere ser agua clara: manantial que fluye sin rumbo fijo, regocijo para todos los errantes. Estanque pétreo sombra cobijo en estaciones transitorias. Hoy aquí mañana en el collado brillante oscuro sol y luna. Hoy otoño escarlata, mañana estío seductor. Cuando llegue mi corazón perecedero a los palacios siderales en silencio, sin ser, casi, percibido, rogaré por otra vuelta otro giro por la vida para enmendar lo reparable y sentar, por fin palabra, cabeza y compasión.
CENA DE HIEL La cena está servida treinta cucharas para devorarla. Treinta comensales perpetuos que no saben de la brisa sí del hambre, acaso de la fiebre y el fracaso acaso. La cena está servida. Ya no saben qué es llorar, que también cuesta. Lo que no se puede suplir que se mitigue con los sueños cucharada a cucharada (de plástico de tira y pon) anhelos sin muchas perspectivas con cada engullida dulce-amarga como la vida misma. Cena de hiel que un corazón caritativo ha ofrecido para hoy, pan, ¿qué para mañana? 
OTRA VEZ Mentiras de siempre otra vez en el televisor, la prensa, en internet. Nuevos embusteros que quieren embaucarnos comernos la mollera con engaños y nosotros que sucumbimos. Lo que queremos no son flores consuelo para tontos ayudas para distraer esperanzas que no lo son. Dejad de bombardearnos con guerras de otra esquina (siempre siempre intencionadas, igual que la noticia). ¿Sabéis? Con dignidad, con vuestra dignidad sería suficiente. Pero no, tenéis que fabricaros nuevos muñecos de cera o de hoguera palacios portentosos esperanzas narcotizadas pueblos imbéciles que os besan el culo. Y así seguir la juerga. A fin de cuentas la dignidad os importa un bledo. No os llena el bolsillo ni la ambición. ¿Existirá la palabra ética?
FRENTE A LA TUMBA Pongo las piedras de rigor sobre la tumba. Sin llanto o artificios enterrados quedan los mitos de antaño el abandono la invocación inútil. Enterrados quedan desasosiego mirada inquisidora ira/frustraciones/miedo odio/pesadumbres mente de estrechas miras. No he querido pronunciar la plegaria austera inexorable para disipar los monstruos. Más bien evoco un canto, melodía tolerante no volver a perder la dignidad la chispa serena, expectativa. Enterrados quedan, piedras.