Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de 2009

ÚLTIMO VIAJE INCANDESCENTE

Miro los plumajes del ave a través de mis lentes fuliginosos que no sé su nombre y presiento su trastornado revoloteo asfixiado yo también aquel verano de mi ciudad sin parques. Pobre criatura, se le ocurre se me ocurre contemplar este infierno en el más caluroso de los estíos. Su ventaja, agilidad para volar al árbol rama de la desesperación o cobijo a su sombra. Y yo dónde me meto, bosque de asfalto ventanales de cristales incandescentes que succionan hasta la última radiación. Cómo se te ocurre, criatura, apoyarte en mi mortecino alféizar horno y cocina a la intemperie, sin butano. Te observo sin tiempo ni distancia y ni te inmutas. Lo padezco me reflejo en tu plumaje blanquecino con motas gris verdoso e imagino también tu sufrimiento, pobres patitas primorosas distinguidas más finas que mi meñique encorvado casi sin garra para aprehender. ¿Cómo soportas el fervor de las baldosas que ni yo mismo soy capaz de acariciar? Por fin me has entendido: levantas vuelo hacia el roble de la es...
Me pregunto si todos los sueños hallan su respuesta al final del arco iris, si todas las miradas alcanzan el milagro. Me pregunto si seguiremos andando en paralelo, punto de encuentro desaparecido en el último agujero negro. En medio de distancias indistintas seguro me equivoco. Las enredaderas que trepan por el muro ya no son de fiar, traviesas, embusteras, huelen a perfume embaucador como el aroma de tu piel seductora. No puedo asirme a sus bejucos, como antaño, para subir hasta tu aliento y figurarte. Presiento que en el centro de tu pecho se enmascara el virus que extenúa mis neuronas y eriza el cuero que me circunda al mínimo movimiento de tu figura a contraluz. Aún así me sigo preguntando ¿abriré mi ventana a lo que venga después del enésimo enunciado, o seguiré arropado con los sueños al final del arco iris?